1.8 Justificación

La situación de violencia que se vive en el mundo conlleva a pensar que la escuela como formadora de ciudadanos, influye bastante en los comportamientos futuros de los mismos. En consecuencia, la escuela se ha de convertir en un laboratorio de paz y convivencia, en donde padres de familia, profesores y alumnos sean los directamente responsables de los procesos de formación que se dan en ello. Por lo tanto el conocimiento o desconocimiento de las situaciones de convivencia que se dan en la escuela, determina en gran medida enrutar coherente y asertivamente los procesos de formación del futuro ciudadano respecto a la convivencia.


Hay muchas oportunidades para enseñar los principios de convivencia a través de áreas y temas existentes. El propósito de esta investigación se enfoca sobre formas en las que pueden incorporarse principios de convivencia en la enseñanza y aprendizaje de las matemáticas siendo incrementados utilizando una aproximación vía resolución de problemas.


Números crecientes de individuos necesitan ser capaces de pensar por sí mismos en un medio ambiente constantemente cambiante, particularmente cuando la tecnología facilita el acceso y la manipulación de grandes cantidades de información. También necesitan ser capaces de adaptarse a situaciones no familiares o impredecibles más fácilmente que los que las personas necesitaban en el pasado. La enseñanza de las matemáticas abarca habilidades y funciones que son parte de la vida diaria.

Presentar un problema y desarrollar las habilidades necesarias para solucionar el problema es más motivador que enseñar las habilidades sin un contexto. Esto permite que los estudiantes vean una razón para el aprendizaje de matemáticas, y de aquí se vean más profundamente involucrados en su aprendizaje. Enseñanza a través de resolución de problemas ayuda a incrementar el razonamiento lógico, también permite un desarrollo integral de las personas mediante la experimentación de un rango completo de emociones asociadas con varias etapas del proceso de solución.


Una aproximación resolución de problemas provee un vehículo para que los estudiantes construyan sus propias ideas sobre matemáticas y tomen responsabilidad por su propio aprendizaje, que son esenciales para su desarrollo.

1.2 Formulación del problema

¿Cómo inciden los principios de convivencia en la enseñanza y aprendizaje de la matemática vía resolución de problemas en los niños y niñas del grado cuarto y quinto de la Institución Educativa Alto del Obispo, Sede Los Sauces del Municipio de San Agustín Huila?

1. RESUMEN DE LA PROPUESTA

1.1 Descripción del problema


A nivel nacional los estudios realizados por el Ministerio de Educación Nacional demuestran que “en el aula aun se establecen unas relaciones pedagógicas verticales, maestro-estudiante caracterizados por el autoritarismo del docente, la poca confianza de los niños y niñas en sus maestros, la poca tolerancia a la diferencia por parte de los maestros, las llamadas de atención en tono airado. De igual forma, la sensación de los niños de no sentirse escuchados, es demostrado por un 67%; que en un 47% los niños no expresan libremente sus emociones y sentimientos; no existen estrategias adecuadas para solucionar conflictos lo demuestra un 20%; además inquieta el hecho de que el 27% establece la baja motivación interna de los docentes, no se desarrollan las competencias comunicativas en los niños y niñas lo demuestra el 10%; lo más grave es que en un 47% existen dificultades en las relaciones interpersonales dentro de la institución como tampoco estrategias de solución de conflictos. Por otro lado se evidencia el 27% de situaciones familiares como: maltrato, violencia intrafamiliar y abuso sexual, madresolterismo, falta de formación de los padres para ejercer su rol y familias mononucleares”1

1.1 Descripción del problema

A nivel nacional los estudios realizados por el Ministerio de Educación Nacional demuestran que “en el aula aun se establecen unas relaciones pedagógicas verticales, maestro-estudiante caracterizados por el autoritarismo del docente, la poca confianza de los niños y niñas en sus maestros, la poca tolerancia a la diferencia por parte de los maestros, las llamadas de atención en tono airado. De igual forma, la sensación de los niños de no sentirse escuchados, es demostrado por un 67%; que en un 47% los niños no expresan libremente sus emociones y sentimientos; no existen estrategias adecuadas para solucionar conflictos lo demuestra un 20%; además inquieta el hecho de que el 27% establece la baja motivación interna de los docentes, no se desarrollan las competencias comunicativas en los niños y niñas lo demuestra el 10%; lo más grave es que en un 47% existen dificultades en las relaciones interpersonales dentro de la institución como tampoco estrategias de solución de conflictos. Por otro lado se evidencia el 27% de situaciones familiares como: maltrato, violencia intrafamiliar y abuso sexual, madresolterismo, falta de formación de los padres para ejercer su rol y familias mononucleares”1


La situación anterior no es ajena a la cotidianidad de la escuela Los Sauces donde igualmente se presenta recurrentemente manifestaciones caracterizadas por el autoritarismo del docente, donde se muestra en algunas ocasiones intolerante, lo que crea un clima de zozobra que genera conflicto.


Frecuentemente en la labor educativa, se presentan problemas escolares en donde se ve actuar al niño o niña con rebeldía contra sus compañeros y hasta con su maestro (a), se manifiesta frente a su entorno reacciones de complacencia o agresividad, se encuentran situaciones generadoras de violencia, los niños se pelean, se agreden con gran facilidad, rompen los trabajos y aunque no lo hacen directamente con el maestro, normalmente descargan en sus compañeros los sentimientos y emociones a través del empleo del lenguaje como insultos, malas contestaciones y llegando a solucionar los conflictos por vías de hecho, enrareciendo el clima de convivencia que debe reinar en la Escuela.


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1. MINISTERIO DE EDUCACIÓN NACIONAL. Componente de convivencia escolar y comunitaria. 2000

De la misma manera, hay niños que son más activos que otros y manifiestan siempre mayor necesidad de movimiento, generando una problemática que inicia cuando ésta actitud no es bien aceptada por el grupo y se convierte en un conflicto, que trae como consecuencia de ello un comportamiento inestable de éste, que entorpece las relaciones con sus compañeros y maestro.


Otro factor que se ve frecuentemente en la labor educativa, es la salida a una situación problemática empleando la falsedad y la mentira como medio para lograrlo, con el ánimo de evadir del problema sin mirar que se está agravando. Regularmente ésta es utilizada para obtener algún beneficio personal, esquivar responsabilidades si es posible, entre otros.


Igualmente, el hurto es una de las conductas delictivas que aparece en el niño, éste lleva a casa objetos que no le pertenecen incluso dinero u otras pertenencias. Muchas de las actitudes de los niños son el reflejo del maltrato diario que la pobreza infringe, también de la violencia sobre sí mismos o que ocurre en su entorno, generado por actores distintos como padres de familia o allegados, que se manifiestan en actuaciones, como aislarse o responder agresivamente, convirtiéndose de esta manera en protagonistas de su propia vida que se ve reflejada en la escuela. Dichas actitudes conmueven y dejan mucho que pensar.


En cuanto a las situaciones de aula, en donde el docente de buena manera influye en los estados de convivencia, se puede notar que éste regularmente desconoce la situación problemática del estudiante lo cual conlleva a que las capacidades de trabajo del estudiante y sus manifestaciones de convivencia mermen notoriamente.


El buen desempeño en matemática es considerado, en general, como una muestra de sabiduría e inteligencia. Se ve a quienes tienen facilidad para la matemática como gente especial, con alguna dote extraordinaria. Este ‘prestigio’ a su vez genera en quienes tienen dificultades un rechazo a la matemática. No es infrecuente que estos estudiantes con dificultades presten menos atención a la clase y molesten e inquieten a sus compañeros generando así un malestar que ocasiona problemas de indisciplina en el aula.


Por otro lado, en muchas ocasiones, en el proceso enseñanza aprendizaje de la matemática no se proponen situaciones en las que los estudiantes tengan un papel activo, es decir, plantearles algo que tengan que hacer como vivencia propia, por ejemplo, ya sea porque corresponda a alguna situación de la vida diaria o, a algunas de sus aficiones; aunque esto último no siempre resulta fácil. Igualmente, muchas veces no se ofrece material que ayude a representar las propuestas, es decir, algo que permita que, al pensar maneras de resolver una determinada cuestión, se pueda materializar y comprobar los resultados de una manera física.

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